No existe una regla estricta o inquebrantable a la hora de elegir gafas según la forma de la cara, ya que también juega un papel muy importante el estilo y personalidad. Identificar y aprender a reconocer tus rasgos faciales, gustos y preferencias te permitirá encontrar las gafas ideales.
Lo primero que debes hacer es dividir las formas de los rostros en dos familias: Angular y Redonda.
En esta familia se encuentran los rostros de forma cuadrado triangular y diamante.
Esta familia está conformada por los rostros de forma ovalado y redondo.
Un truco para reconocer la forma del rostro, es observar la mandíbula y el mentón. Esta es la base para identificar muy bien el tipo de rostro.
Cuando hayas reconocido la estructura externa de la forma de tu cara, hay dos enfoques que puedes manejar: Contraste y Armonía
Contraste: Este es el enfoque más común, ya que con el se logra generar equilibrio y proporción.
Armonía: Con este enfoque se busca mantener la coherencia según las líneas de tu cara.
Una forma cuadrada es cuando esa cara tiene un contorno ligeramente cuadrado, especialmente en la mandíbula y en la parte inferior de la cara.
Para dar contraste son ideales las gafas en forma agatada o con la parte superior ligeramente alargada, sin necesidad de ser muy punteada. Otros modelos que funcionan muy bien en este tipo de rostro son las gafas piloto o aviador que aportan suavidad al rostro que por naturaleza es un poco más angular.
La forma triangular hace referencia a un rostro con forma de triángulo invertido. La parte de arriba por la parte de los ojos es más ancha.
Es un tipo de rostro al que se adaptan muy bien la mayoría de gafas: grandes, marcos gruesos, formas cuadradas y redondas. Una forma que no genera contraste son las gafas agatadas porque al tener forma alargada en la parte superior tienden a enfatizar/marcar demasiado el efecto de triangulo invertido.
Ver: Colección de gafas de sol redondas
Es una figura regular y proporcional pero más pronunciada en las partes centrales, a la altura de los pómulos. Es una forma de rostro muy versátil, pero es mas apropiado si eliges gafas más largas que altas, que agregan volumen en la parte superior. Unas gafas rectangulares generan un equilibrio perfecto en este tipo de rostro.
Es la forma de rostro más regular y simétrica, por esto es la forma más versátil a la hora de elegir gafas. Ya que no se necesita compensar ciertas partes del rostro, se puede jugar con diferentes formas y tamaños, dependiendo si es un ovalo pequeño o grande.
Ver: Colección gafas de sol cuadradas
Es la forma con contornos más redondeados, usualmente alrededor de las mejillas y de rostro corto. En este caso es ideal usar gafas que favorezcan la verticalización del rostro no importa el estilo, lo importante es que sean gafas cortas en términos altura, es decir formas alargadas horizontalmente.
Para finalizar, recuerda que estas no son reglas inquebrantables a la hora de elegir las gafas según la forma de la cara. También depende también mucho del estilo, en donde nada es correcto ni incorrecto. Las gafas de sol tienen un impacto directo en tu imagen y lo importante es que te sientas bien con ellas.
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